Hoy celebramos como Provincia, 391 años de presencia evangelizadora en nuestra patria chilena . Como agustinos depositamos nuestra vida a los pies de nuestra madre, la Santísima Virgen María en la advocación de Nuestra Señora de Gracia, para que como madre ella guíe nuestra mirada, nuestros pasos, nuestro quehacer cotidiano hacia Jesucristo, nuestro Buen Pastor de quien aprendemos a desplegar nuestras mayores riquezas para compartirlas con los más necesitados. Esas riquezas hoy son abrazos sinceros, conversaciones restauradoras, compañía fiel, experiencia de fraternidad, hacer presencia y vida donde el Señor nos pide.
Una expresión de esta compañía agustiniana se renueva con los salones parroquiales que fueron bendecidos por nuestro Padre Provincial, P. Enrique Catalán osa. en San Fernando, espacios de encuentros con el Señor y espacios de misión para todos aquellos que buscan profundizar más en el misterio de Dios a la luz del carisma agustiniano.
El Señor siga regalando vida a nuestra Provincia, que podamos amar sin medida con el corazón de Jesús.
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